Aplicaciones de la biotecnología moderna
La biotecnología moderna emplea la ingeniería genética para crear organismos genéticamente modificados (OGM) con distintas finalidades:
- En la industria agrícola y ganadera, creando OGM que:
- Resistan las plagas, sequías, bajas temperaturas, variaciones de salinidad.
- Obtengan una mayor producción.
- Produzcan sustancias, como vitaminas o proteínas, que no posea el organismos sin modificar.
- Produzcan frutos con maduración retardada.
- Obtención de alimentos transgénicos.
- En la industria farmacéutica:
- Obtener antibióticos, hormonas, vacunas, y proteínas que no provocen el efecto de rechazo en la persona que las recibe.
- En medicina:
- Análisis genético, detectando enfermedades genéticas antes de que se desarrollen (Alzheimer, Parkinson, etc.) y poder prevenirlas y actuar sobre ellas en sus inicios.
- Terapia génica, introduciendo determinados genes en el paciente para combatir determinadas enfermedades. Su pueden sustituir genes alterados, inhibir la acción de genes defectuosos o insertar nuevos genes.
- Comparación del ADN de dos personas para la identificación de víctimas, pruebas de paternidad o de autoría de un delito.
- En medio ambiente:
- Recuperar suelos contaminados con metales pesados.
- Obtener energía a partir de aguas residuales en las depuradoras.
- Degradar residuos tóxicos, como por ejemplo, las mareas negras, donde se pueden utilizar bacterias capaces de degradar los hidrocarburos de petróleo y transformarlos en sustancias menos dañinas para el medio ambiente.
- Obtener plásticos biodegradables a partir de bacterias modificadas genéticamente.