Saltar la navegación

Directorio Militar

Estableció un gobierno formado por militares que tomó medidas propias de una dictadura:

  • Abolición de la Constitución de 1876 (que fue la más larga).
  • Supresión de las Cortes, por lo que se gobernó a base de decretos.
  • Los ayuntamientos y las diputaciones provinciales son sustituidos por Juntas de Vocales, formadas por los mayores contribuyentes de las localidades, elegidos por el gobernador civil.
  • Todos los gobernadores civiles de entonces son sustituidos por militares, que controlan para evitar el funcionamiento del caciquismo y la corrupción, aunque muchos terminasen siendo corruptos.
  • Los altos cargos de la administración son sustituidos por militares o adeptos al régimen.
  • Limitación de la libertad de prensa.
  • Se suspendió la Mancomunidad Catalana, la única que se formó, ya que Primo pretendía la unidad nacional. Incluso prohibió el uso del catalán en actos oficiales y en las misas, lo que radicalizó las posturas nacionalistas.

Tras el Desastre de Annual, en el ejército se diferenciaban dos posturas: los africanistas, partidarios de mantener la guerra en Marruecos, y abandonistas, que entendían que había que abandonar la guerra dadas las circunstancias. La dictadura de Primo en un primer momento era abandonista debido al desprestigio español en el ámbito internacional y a la incapacidad, falta de adiestramiento, de armamento y de estrategia del ejército español. Pero a raíz del apoyo francés cambiaron las posturas: Abd-el-Krim, dirigente del ejército rifeño, inició un tremendo ataque contra los españoles que acabó con una gran sangría del ejército, tras lo cual, consideró a España un enemigo derrotado y decidió emprender una ofensiva contra el protectorado francés. A raíz de eso, Francia se alió con España para dar lugar al desembarco de Alhucemas en septiembre de 1925, donde Primo de Rivera, con apoyo francés, usó la aviación, marina y artillería para iniciar un ataque conjunto. En 1926, Abd-el-Krim pidió negociaciones para concluir el conflicto.

En el ámbito nacional, se fue organizando progresivamente la Unión Patriótica, una entidad para aportar apoyo social al régimen, mover las masas y ensalzar la dictadura, cuyo lema era “Patria, Religión y Monarquía”. Colaboraban los círculos más católicos, que se consideraban “gentes de ideas sanas y hombres de buena fe”, y, al carecer de ideario, no se consideraban ni de derechas ni de izquierdas.

Se suprimieron los sindicatos y los partidos políticos excepto el PSOE y la UGT, lo cual supuso una división de opiniones dentro del mismo: una corriente liderada por Indalecio Prieto, en contra del apoyo socialista a la dictadura, y el sector de Largo Caballero (que llegó a ser secretario de Estado), que consideraba que el partido se mantuviera aunque hubiera que apoyar la dictadura. Se argumentaba diciendo que no era un régimen férreo, y que podría servir de paréntesis para tranquilizar el entorno y así se permita el cambio a una verdadera democracia, y además la pervivencia de la UGT permitía que el trabajador pudiera seguir siendo defendido. Por su parte, el Directorio militar impulsó una fuerte represión contra los cenetistas y el PCE.